"Hay discusiones que deben darse puertas adentro"

Después de su paso por la Secretaría de Gobierno atravesado por la pandemia, Alejo Pérez llegó al Concejo Deliberante, donde preside el bloque de Juntos. En ambos casos debió y debe transitar períodos turbulentos para el oficialismo. Hoy es parte de la primera línea ofensiva en los debates políticos del Legislativo, y le toca dar explicaciones y respuestas. En diálogo con Cuatro Palabras, Pérez asegura que “No ha habido pedido de informes que no hayamos aprobado, situaciones que no hayamos aclarado. Incluso, de forma personal, me hice cargo de cualquier error que hubiéramos tenido en la gestión”. Además, se refiere al lanzamiento del espacio Evolución realizado el día viernes en el Comité Alem e insiste en que las críticas “deberían darse en otro ámbito” y que “cada uno se hará cargo de las decisiones que fue tomando”.

En la sesión del próximo miércoles, entre otras cosas, se debatirá sobre el crédito de 170 millones de pesos que el Banco Provincia otorgará al Municipio. Se trata de un dinero que el Gobierno prevé utilizar para la adquirir maquinarias, pero que anteriormente solicitó modificar el destino
hacia compra de tierras para viviendas municipales, y fue rechazado.

“Fue una discusión de si era viable o no el objeto del préstamo, pero finalmente se resolvió que fuera utilizado para compra de maquinarias y pensamos en afrontar la compra de tierras con recursos ordinarios”, explicó Alejo Pérez. Lo cierto, es que en este contexto de inestabilidad económica, con un empréstito en pesos, las maquinarias en dólares y la falta de disponibilidad de las mismas, “no queríamos limitar la aprobación de la Ordenanza a una máquina específica si al momento de ir a comprarla no estuviese en el mercado, entonces se buscó aprobar el crédito destinado a maquinarias viales, pero con la posibilidad de decidir-dentro de las necesidades del Municipio- qué maquinaria adquirir”, dijo.

Respecto a la posibilidad de que el Municipio esté en condiciones de comprar tierras con fondos propios, Pérez aseguró que “los recursos son siempre los mismos y hay que tener prioridades, para el Gobierno la tierra es una prioridad, el problema es que hoy se está encontrando con que mucha gente no quiere vender, o quien estaría dispuesto a vender en otra situación hoy no quiere hacerlo porque al Estado Municipal hay que venderle en pesos, y si no logran comprar otra propiedad de la
misma manera, no les interesa y con justa razón, si te llenan de pesos ¿qué hacés con esa plata?”.

Pero además, uno de los requisitos es que las quintas posean servicios. De todos modos, indicó que “la posibilidad de comprar con fondos del Municipio es real, existe, siempre que pueda salir este crédito para maquinarias y nos permita disponer de esos fondos”.

-¿Cuánto condiciona el contexto y desgaste político de siete años de gestión al bloque oficialista y en particular a vos como presidente de bloque?

-Cuando en un país como el que tenemos las problemáticas son tan profundas y estructurales, y estamos todo el día hablando del dólar, de la economía, de la pobreza, las cosas que pueden decidir los concejales pasan a ser de menor relevancia. Hoy ni los concejales ni el Ejecutivo tienen la posibilidad de resolver la inflación, que es el mayor problema que tienen los ciudadanos. Por lo tanto, las discusiones políticas que se dan en el Concejo tienen que ver con una cuestión de posicionamientos.

Las diferencias entre el gobierno de Macri y éste, es que en su momento había medidas económicas y políticas con las que se podía coincidir o no, pero hoy eso no lo estamos viendo y es lo que lleva a que haya mayor incertidumbre.

-El Municipio también cuenta con problemas estructurales que afectan la calidad de vida, y hoy a través del Concejo les toca ser el primer frente que da respuestas...


-Sí, pero el Concejo muchas veces cumple la función que debe cumplir y muchas veces funciona como caja de resonancia de cuestiones políticas. No ha habido pedido de informes que no hayamos
aprobado, situaciones que no hayamos aclarado. Incluso, de forma personal, me hice cargo de cualquier error que hubiéramos tenido en la gestión. Hay mucho uso político desmedido de los debates, e incluso acusaciones que no se pueden tolerar.

-Se presentó el espacio Evolución en Chacabuco, vino Danya Tabella junto con otros referentes nacionales y fueron recibidos por un sector del radicalismo. Hasta el momento, Martín Lousteau se asociaba con Alejo Pérez, Lisandro Herrera, entre otros. ¿Fueron convocados?¿qué podés decir de las críticas hacia el Gobierno local?

-En primer lugar, creo que está bien que el radicalismo tenga apertura y busque más base, y que cada uno busque la línea donde se sienta más cómodo. Sí creo, también, que hay algunos dirigentes políticos que tenemos responsabilidad de gestión y tenemos que hacernos cargo de eso. El país está viviendo una situación demasiado compleja en términos económicos, políticos, sociales y tengo la preocupación de que se vaya agravando día a día porque no hay respuestas del Gobierno nacional, entonces lo que exijo es que no haya disputas de poder en términos personales, y lo mismo le exijo a mi espacio, que sea con cuidado y responsabilidad. En Chacabuco, quienes se referencian como Evolución son Mariano Cámera y Ariel Di Piero, yo no estoy en el espacio de ellos, pero no implica que a nivel nacional no esté de acuerdo y en sintonía con Evolución. Martín Lousteau es un referente político que tiene que ser escuchado y me parece muy bien que tenga cada vez más preponderancia en el partido.

 

-El exconcejal Di Piero dijo que “hay un descontento con la forma de gobernar y de hacer política y lo que nosotros buscamos es generar un espacio que contenga a la gente que se fue disconforme", ¿lo sentís personal?¿Es un reclamo interno?

-Di Piero fue secretario de este gobierno hasta hace muy poco, pero reitero que no me parece oportuno dar esta discusión en términos mediáticos. Pero sí puede haber distintas visiones y críticas constructivas puertas adentro, en otro ámbito, de hechoel exconcejal es vicepresidente del Comité radical, con lo cual tiene el espacio donde poder hacerlo.

-Es la primera vez en siete años que las puertas de la Casa Radical las abre un espacio sin el visto bueno del intendente Aiola, ¿cómo afecta este hecho político al armado 2023?

-No veo problema, el Comité no es de un espacio, es de los radicales y todos tienen la puerta abierta. De hecho se han hecho eventos de Juntos en el Comité. Me parece que no afecta al entramado 2023, son discusiones que se darán más adelante y cada uno se hará cargo de las decisiones que fue tomando, o responsable de los caminos que fue eligiendo. En definitiva, que se ensanche la discusión implica que se debe avanzar hacia una conjunción de ideas y a un espacio fortalecido y a un candidato del radicalismo que puede ser el propio Intendente o cualquier radical que esté en condiciones de asumir ese desafío, pero me parece que ponernos a discutir ahora esas cuestiones es una falta de respeto hacia los ciudadanos.


-¿Qué expectativas tenés a nivel personal?

-En este momento hay que apostar a mantener una institucionalidad que día a día se va agravando. Vamos a terminar el año con inflación récord, cotización del dólar sin techo, con faltantes de productos, con inseguridad, entre otras cosas. Discutir candidaturas es una falta de respeto. Lo que sí, como espacio, el radicalismo tiene que fortalecerse, trabajar en planes de Gobierno, porque hay que estar preparados y tener mucho coraje para agarrar la dirección de la Argentina, y no tengo dudas que va a ser el espacio Juntos en el 2023. Va a haber que hacer un montón de reformas que no se hicieron, y el radicalismo tiene que estar preparado para hacerlo.