- Uno escucha al candidato José Luis Tedesco o las ideas de La Libertad Avanza a nivel local y son similares a las del candidato oficialista, Alejo Pérez, sobre todo cuando se refieren a la transparencia, a la necesidad de que el Municipio sea eficiente, dinámico, ¿en qué se diferencian?
- Creo que no es así, las diferencias que existen, básicamente, son históricas. Las ideas de la libertad fueron recién aplicadas en 1853, cuando la Argentina fue potencia, y la realidad es que, desde esa época para acá, hemos visto como se ha ido degradando toda nuestra economía, lo social, y no escapa lo local.
La realidad es que somos dos espacios totalmente diferentes. Días atrás se rumoreó que podría haber algún tipo de acuerdo entre ambos espacios, o hay candidatos de Juntos que salieron a hablar de ejes de transparencia, que fue básicamente nuestro eje de trabajo desde el día uno, cuando proponemos la implementación de la norma 37.001 en el Municipio. Aplicar este tipo de normas es llevar los mecanismos que tienen una función transparente y de mayor beneficio para el ciudadano chacabuquense. Donde también tenemos datos fehacientes de que esto puede ser así. Vamos a implementar mecanismos donde se puedan hacer denuncias de manera anónima o personal.
Igualmente celebramos que otros espacios compartan eso, por más que sea una propuesta que surgió de nuestro sector, creemos que es el camino por el que tiene que ir Chacabuco.
- ¿Pudieron ir viendo o evaluando quienes fueron, para tener un perfil, los votantes de La Libertad Avanza?
- Tenemos votantes de todos los niveles y rangos que podemos analizar. Básicamente hay un enojo de la sociedad hacia ciertas formas de hacer política y nosotros venimos con un mensaje distinto. A proponer algo distinto. A mi me tocó fiscalizar en las localidades y vos veías que nuestro votante no es ni el empresario ni el empleado, es bien amplio.
- Ustedes se presentan como lo nuevo, lo disruptivo y hacen hincapié en que los vecinos están cansados de la vieja política, pero uno cuando revisa en los últimos dos años, el candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, prácticamente no asistió a las sesiones de la Cámara de Diputados, ¿ustedes que opinan de esto?
- Ese dato no lo tenía. Sí lo vi asistir cuando se votó el presupuesto y fue el único espacio que ofreció resistencia a aprobar un presupuesto nacional con un 30% o más de déficit fiscal. No te sabría decir por qué puede no haber asistido pero cuando fue importante la asistencia siempre estuvo.
- Hubo algunas polémicas en redes sociales por declaraciones de otra candidata a concejal de La Libertad Avanza sobre temas educativos, ¿cómo viste eso y qué posición tienen ustedes sobre este importante tema?
- Creo que fue operada la candidata. Por ahí no se entendió bien cuál era el mensaje.
Para hablar de educación, creo que hay que empezar por algo que es básico. Si bien es importantísima la educación y entra dentro de nuestro eje de capital humano, es fundamental que se lleve adelante un cambio en esto. Todos estamos de acuerdo que la educación en el país tiene muchísimas oportunidades de mejoras. Pero hay que hablar de otra cosa importante, que es que los chicos coman. Tenemos chicos que comen día por medio, hay 50% de pobreza.
Se le dió mucha trascendencia a eso y estamos olvidándonos de temas fundamentales, como el acceso a la salud. Hay que dar una mirada más general a esos temas y apuntar por ahí.
Salen a decir que lo que propone Milei es privatizar la educación, lo que él dice es que quiere cambiar ciertos mecanismos de cómo se suministra el fondo público. En vez de financiar a la oferta, financiar la demanda. En ningún momento dice que no va a ser pública la educación, esa es la realidad. En lugar de financiar escuelas e instituciones, financia al alumno, les da la libertad de que elijan a qué institución quieren ir.
Lo mismo pasa con la salud, se plantea de esa manera, financia al paciente y al alumno para que elijan dónde atenderse.
El sistema de vouchers en Suecia tampoco abarca a toda la educación, son ciertos sectores los que tienen vouchers y el resto sigue siendo público. El Estado sigue aportando a esas instituciones. A esta altura ya lo veo más como una chicana mediática.