Con motivo de saludar a los cuatro mil delegados y representantes de los medios que protagonizarán el VII Foro Económico Oriental, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha destacado este lunes la importancia del tema principal que caracteriza el evento: “Hacia un mundo multipolar”. "El obsoleto modelo unipolar está siendo reemplazado por un nuevo orden mundial basado en los principios fundamentales de justicia e igualdad, en el reconocimiento del derecho de cada Estado y nación a seguir su propio camino soberano de desarrollo", señaló Putin, y agregó: "Es precisamente en la región de Asia-Pacífico donde se están formando poderosos centros políticos y económicos que impulsan a este proceso irreversible".
El mandatario ruso destacó también "cómo la cooperación bilateral directa entre los Estados de Asia-Pacífico está creciendo y cobrando fuerza, así como su cooperación en el marco de las asociaciones tan influyentes como la Comunidad Económica Euroasiática, la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), los BRICS, la APEC y la ASEAN".
La agenda
Se prevé que el evento incluya más de setenta actividades de negocios. En este sentido, el presidente ruso indicó que se firmarán "contratos comerciales y acuerdos a largo plazo entre los círculos empresariales y las autoridades regionales". El foro "promueve activamente la atracción de flujos de inversión e innovaciones tecnológicas, así como un mayor aprovechamiento del rico potencial económico y social del Lejano Oriente ruso", expresó Putin.
Por su parte, Antón Kobiakov subrayó que el Foro de Vladivostok se ha convertido en "la plataforma de negocios global más popular para la ampliación de la cooperación internacional en Asia-Pacífico". El asesor presidencial ruso señaló que se ha preparado un amplio programa de negocios, dedicado a los temas actuales del desarrollo del Lejano Oriente, la economía global y regional, la cooperación internacional, así como la discusión de las vías para salir de la crisis, y la nueva arquitectura del mundo.
El programa empresarial del Foro incluye una serie de diálogos empresariales con países socios líderes en la región de Asia y el Pacífico, y con la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), una organización de integración clave que une a las naciones en desarrollo dinámico en el sudeste asiático.
Un actor protagónico
Para comprender mejor cómo funciona el mundo que occidente no muestra, centrémonos por unas líneas en esta sigla: ASEAN. El 8 de agosto de 1967, los Ministros de Relaciones Exteriores de Indonesia, Malasia, Filipinas, Singapur y Tailandia se sentaron en la sala principal del edificio del Departamento de Relaciones Exteriores en Bangkok, Tailandia, y firmaron un documento dando vida a la organización intergubernamental más exitosa en el mundo en desarrollo en la actualidad. Luego se unió Brunei Darussalam, el 7 de enero de 1984, Vietnam lo hizo el 28 de julio de 1995, Lao PDR y Myanmar el 23 de julio de 1997, y Camboya el 30 de abril de 1999, conformando lo que hoy son los diez Estados miembros de la ASEAN.
En el Tratado de Amistad y Cooperación en el Sudeste Asiático de 1976 se fijaron los objetivos: Respeto mutuo a la independencia, soberanía, igualdad, integridad territorial e identidad nacional de todas las naciones; El derecho de todo Estado a llevar su existencia nacional libre de injerencias, subversiones o coacciones externas; No injerencia en los asuntos internos de unos y otros; Arreglo de diferencias o controversias por vía pacífica; Renuncia a la amenaza o al uso de la fuerza; y Cooperación efectiva entre ellos.
Rusia sigue marcando el rumbo
Desde el 24 de febrero de este año, la Federación de Rusia inició una acción militar en Ucrania cuyos principales objetivos son la “desnazificación” y la “desmilitarización” del régimen que gobierna en ese país desde el golpe de Estado de 2014. Durante ocho años, Kiev ha hostigado permanentemente a la población del Donbáss, una comunidad que resistió desde el primer día al gobierno nazifascista auspiciado por las potencias imperialistas occidentales. En paralelo, Moscú no ha dejado de proponer abrir las puertas de un mundo nuevo basado en las relaciones multipolares y desterrando la injerencia imperial de Estados Unidos y sus aliados. "Rusia se manifiesta a favor de diferentes plataformas de integración y de proyectos que persigan coordinar los esfuerzos para promover una agenda unificadora, orientada hacia el futuro", recalcó recientemente el ministro de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, quien enfatizó además que "en las realidades geopolíticas actuales, no se requieren nuevas líneas divisorias, sino la construcción de puentes y la unificación de los esfuerzos".
La globalización surgida en los noventa del siglo pasado, el “fin de la historia” y el mundo unipolar están agonizando. Hoy, nuevos y diversos horizontes se presentan ante la humanidad. “La era está pariendo un corazón”, podemos cantar junto a Silvio Rodríguez.