“El problema está relacionado a quién se queda con los dólares”
Frente a decenas de vecinos y militantes, e invitado por Julián Domínguez, Hernán Letcher, reconocido economista, vicepresidente de YPF Litio y director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), brindó una charla en el local de Unidad para la Victoria bajo el nombre “La disputa por el diagnóstico económico”. Allí se refirió al problema de la falta de dólares, la economía bimonetaria y la necesidad de “explicarle a los vecinos que el quilombo está relacionado con los dólares y quién se queda con ellos, porque la disputa está ahí, y eso se refleja en las tensiones inflacionarias”.
El contador público egresado de la UBA, director del centro de Economía Política e investigador, Hernán Letcher, compartió anoche una charla en la Unidad Básica para la Victoria, frente a casi un centenar de vecinos y militantes.
El exministro Julián Dominguéz inauguró la charla, y aseguró: “No me equivoco si digo que Hernán es quien mejor interpreta los desafíos de este tiempo, el pensamiento económico de Cristina, y a muchos gremios industriales, no tengo dudas que es una de las personas más consultadas de nuestro espacio, quien mejor entiende la contradicción de ser una colonia o ser una patria industrializada”.
El economista eligió tratar cuestiones estructurales de la economía argentina, aunque aseguró que a veces pueden sonar “lejanos para tocarle timbre al vecino, y explicar en clave electoral por qué nos tiene que votar”, pero indicó que “es bien importante que entendemos el quilombo en el que estamos metidos en este momento en la Argentina tiene que ver con la economía bimonetaria, y estamos obligados a recorrer ese camino”.
A propósito de la convocatoria a la charla, aseguró que “la primera cuestión a tener en cuenta es la disputa por el diagnóstico económico”, ya que en la las elecciones generales de octubre, “se definirán cuestiones fundamentales del país, por al menos veinte años y justamente por eso hay una disputa significativa respecto a cuál es el diagnóstico sobre lo que nos sucede”.
En ese momento, realizó un repaso de “lo que sucedió cada vez que en la argentina hubo una disputa por el diagnóstico”, y mencionó la presidencia de Martínez de Hoz, cuando el diagnóstico hizo que se tomen una serie de medidas de política económica en detrimento de las mayorías. Más acá en el tiempo, mencionó a Cavallo y su plan de reformas que incluían apertura, privatización, y desregulación, que implicó “un Estado más chico, la estatización de la deuda privada y un proceso de desindustrialización”. Y, según Letcher, en el 2015 el diagnóstico volvió a jugar en la política económica cuando Prat Gay y Melconian, entre otros, exclamaban que “el problema eran el cepo, las restricciones cambiarias”, y “así es como desregularon la economía, movilizaron tres devaluaciones y terminaron abrazados al Fondo Monetario”.
Para el economista, el planteo que hacen hoy Bullrich y Larreta vuelve a ser sobre el problema del déficit, y “la única que plantea una alternativa es Cristina porque pone el eje del problema en la economía bimonetaria, y ahí está la disputa, porque el problema es a dónde apuntar el recorte”.
“Lo cierto es que Argentina no siempre tiene escasez, ya que durante los últimos tres años, por ejemplo, la balanza comercial generó 45 mil millones de dólares, de los cuales la mitad se fueron en intereses de deuda públicos y privados. Por eso ahí tenés un problema serio, una economía endeudada desde ambos sectores, y el Estado entrega dólares que necesita como el agua. Necesitamos explicarle a nuestra sociedad que el quilombo está relacionado con los dólares y quién se queda con ellos, porque la disputa es quién puede acceder, y que se refleja en las tensiones inflacionarias”, dijo.
Por otra parte, se refirió a la propuesta de dolarización de Milei y aseguró que: “Es un sinsentido, porque niega que el problema principal de la economía argentina es un problema de dólares, y propone que todos los pesos se reemplacen por dólares, pero no tenemos dólares”.
Sobre el final, analizó las dolarizaciones del exterior e indicó que se dividen en dos grandes etapas: “la primera es que cualquier propuesta de dolarización o alternativa implican un ajuste fenomenal sobre el bolsillo, porque lo que no cuentan es que los primeros años de dolarización la participación de los asalariados se reduce; y una segunda etapa que es que no podés tener independencia o soberanía en materia de política económica”.
Y por último, reconoció que el problema principal que aqueja a los vecinos es la inflación, y “este Gobierno no resolvió, ni tampoco el problema de la redistribución del ingreso”. Por eso, adelantó que “el próximo Gobierno tiene que resolver cosas absolutamente trascendentes, como la relación de la economía bimonetaria, la inflación, y además resolver la situación con el Fondo Monetario, porque es impagable para cualquiera, y en ese contexto también se debe discutir Vaca Muerta”.