Una manito de Lula
El presidente de Brasil confirmó que auxiliará económicamente al gobierno argentino, aunque no hubo detalles del acuerdo: “Ya hablamos con los BRICS para ver cómo podemos ayudar”, anticipó.
Tras casi cuatro horas de reunión, Alberto Fernández y Lula da Silva brindaron una declaración conjunta para informar sobre los probables acuerdos alcanzados entre ambos países.
“Somos solidarios con la lucha del gobierno de Alberto Fernández, respecto a la situación de Argentina y la deuda. Me comprometo a hacer todo el sacrificio para ayudar en este difícil momento al país”, aseguró Lula al comienzo de su declaración en el Palacio de Alvorada.
A continuación reveló que abrió una negociación con Xi Jinping -líder chino- para lograr que los BRICS -un foro multilateral integrado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- aporten ayuda financiera al país que atraviesa una compleja situación económica causada por la sequía y la ausencia de reservas en el Banco Central.
Además, el líder brasileño adelantó que dio instrucciones a Fernando Haddad, su ministro de Economía, para que apoye a la Argentina en su negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Esa negociación se encuentra en una etapa preliminar y su objetivo es cambiar las metas comprometidas al momento de firmar el actual acuerdo de Facilidades Extendidas.
“Tengo la intención de ayudar para sacarle el cuchillo que el FMI tiene en el cuello a Argentina. Sabemos cómo se endeudó Argentina y a quién le prestó el dinero, por lo que no se los puede presionar así. Argentina es un país que sólo quiere crecer y generar empleo”, aseguró Lula frente al Presidente argentino.
Lula enfatizó su respaldo político a Alberto Fernández, pero también aclaró que necesita garantías de la Argentina y mantener una conversación institucional con los empresarios brasileños y el Congreso. La intención de Argentina es lograr que Brasil financie las importaciones que recibe de ese país para evitar una merma de sus reservas en dólares, pero ese objetivo necesita de acuerdos políticos con los empresarios locales y una fina legislación técnica para esquivar ciertas complicaciones económicas.
Al respecto, Lula exhibió su conocida sinceridad mediática haciendo referencia a Alberto Fernández: “llegó aquí muy preocupado, y va a volver más tranquilo. Es verdad: sin dinero, pero con mucha disposición política para encontrar una salida para la Argentina”.
Al concluir su presentación, el presidente de Brasil reveló que había mantenido una comunicación con Dilma Rousseff -actual titular del banco de los BRICS- para encontrar una solución legal que permita ayudar desde ese foro multilateral a la Argentina. Sucede que el país no integra los BRICS, y los fondos de su banco sólo pueden ser prestados a los socios signatarios.
“Vamos a hacer lo posible para cambiar esa regla”, exclamó Lula.
A su turno, Alberto Fernández consideró como “muy importante” la reunión con Lula y confirmó que están resolviendo la situación de las garantías para cerrar el acuerdo que permita financiar las importaciones de Brasil a la Argentina.