-A partir del resultado de las PASO, ¿cómo se reestructuró la campaña?¿cómo van a ser los últimos días?
-Rápidamente después de las PASO sacamos toda la cartelería y todas las herramientas proselitistas, interpretando que la gente hoy pide más soluciones que otras cosas. Nos pusimos seguir gestionando, como hicimos los últimos años. Entregamos mil ciento cincuenta tablets para los pibes que gestionamos a través de ENACOM, trabajamos en la creación de nuevas escuelas secundarias, de jornada completa, cosas históricas como la creación de la Escuela Secundaria N 11 de Castilla. Promovimos la llegada del Tren de Desarrollo Social de Nación, que vino con diferentes programas sociales, hoy está el tren vacunatorio que paso por Rawson, O'higgins, Castilla, vimos la problemática oftalmológica que tiene Chacabuco cuando llegó el programa los vecinos iban a las 5 de la mañana a sacar turno, y quedaron muchos vecinos sin ser atendidos porque la demanda superó la capacidad de turnos que tenía el tren. Eso marca claramente una necesidad que tenemos, que haya un oftalmólogo en el Hospital. Es una falencia importante de la gestión, y tendremos que trabajar para que haya uno después del 10 de diciembre. También gestionamos con la UTN, y hoy está abierta la licitación para la construcción de la sede en los Terrenos Ferroviarios.
En el tramo final, sí vamos a seguir con el cara a cara, reeditando nuestras propuestas y acercándolas a los vecinos. Les vamos a contar qué queremos hacer, cómo lo vamos a hacer y con qué equipo de trabajo. Vamos a seguir golpeando puertas y escuchando, fundamentalmente. Va a ser una campaña austera, corta, de proximidad, sin grandes aparatos. Es lo que la sociedad está demandando.
-Durante tus dos gestiones, los vecinos se acercaban al Municipio y tarde o temprano, eran atendidos por un funcionario de alto rango o por el propio Intendente, ¿que tan importante es para vos ese cara a cara para una gestión?
-Es absolutamente necesario. De hecho tenía un día fijo para atender instituciones, y otro día a los vecinos. Dábamos audiencias ordenadamente, después se terminaba desordenando, y es cierto que la gente busca al Intendente, pero tiene que haber equipos de contención que resuelvan los problemas, y que llegue al Intendente aquellas cosas que los estamentos inferiores no pudieron resolver.
El día que me fui del Municipio le pedí a mi secretaria de ese momento, Coquita, que me dijera cuántas audiencias habíamos tenido en esos ocho años. Eran 34.040 audiencias, individuales y grupales. Prácticamente todo Chacabuco paso por el despacho del Intendente. Y para nosotros fue un saldo altamente positivo.
-¿Es un compromiso asumido el de -en caso de ser Intendente- trabajar con el presupuesto participativo?
-Es otra de las claves. Esa es una de las formas de participación de la comunidad. Estamos estudiando, y hemos tenido reuniones de trabajo con quien implementó en la ciudad de La Plata el presupuesto participativo. Nos pudo contar cómo lo llevaron adelante, los errores y aciertos que han tenido. Estuvimos durante varias horas reunidos con el Instituto Proyectar, y lo vamos a implementar. Vamos a dividir la ciudad en determinadas zonas o jurisdicciones, y cada zona va a tener un presupuesto asignado que vendrá del 50% del Fondo de Infraestrucutra, es un monto muy importante que se va a afectar al presupuesto participativo. Cada grupo de vecinos va a poder proponer distintos proyectos para su barrio, y en función de esos proyectos, se define, por votación, cuáles van a ser los prioritarios.
Es una decisión tomada, ya estamos trabajando en los equipos.
-Hace algunos días el exintendente Mario Lalla contaba que gobernó con 18 funcionarios, en un momento donde a la política se le está exigiendo que se ajuste, ¿cómo te imaginás tu equipo de Gobierno?
-Comparto con Mario, tiene que ser un gabinete acorde a los tiempos. Hoy tenemos 200 funcionarios. Hay que volver a un staff normal de funcionarios que funcionen. Un gabinete más austero, más chico, más ágil. Hay que descentralizar la implementación y centralizar la toma de decisiones. Es fundamental coordinar, sino cada uno hace lo que quiere. Y en la implementación es clave la proximidad con el vecino. Tenemos experiencia en eso y podemos desarrollarlo. De hecho, nosotros gobernamos con un tercio de los funcionarios del gabinete municipal.
-¿Qué desafío implica continuar la campaña con los últimos índices de pobreza?, ¿qué respuesta debe dar la política?
-La política tiene que resolver los temas de la gente. Y no son todos los problemas, muchas veces están al alcance de poder ser resueltos. A los dirigentes locales nos piden cosas para los barrios, para las cuadras, mejorado de calles.
Y por otra parte, vemos que hay una gestión municipal que dejó que se fueran tantas empresas importantes de la ciudad como Nidera, Cuesta Colorado, Maitén, entre otras, después se saca fotos en un comercio y se muestra como un gran logro, y a veces solo muestran una habilitación. Hay que salir de este estancamiento. En ese sentido, estamos planteando un nuevo parque industrial para que nuevas empresas se puedan instalar. Por la autovía, por la cercanía con Capital Federal.
-¿Cuántas hectáreas necesita un nuevo parque industrial para ser atractivo para nuevas empresas?
-Como mínimo, veinte o treinta hectáreas. Tiene que estar planificado, con servicios, sistema eléctrico, acceso al gas. Y que les permita a nuevas empresas desarrollarse, y a otras que desde hace décadas están instaladas en el centro de la ciudad, y que puedan dejar de complicar el tránsito, el medio ambiente. Vale la pena apostar a políticas sostenibles en el tiempo, y para eso es fundamental además el crecimiento de la oferta educativa.
-Si te toca conducir los destinos de Chacabuco, podés tener expectativas legítimas de los distintos sectores que integran Unión por la Patria de formar parte del nuevo Gobierno, como también personas de confianza, ¿tenés pensado un potencial Gabinete?
-Nombres propios no tengo. Sí una idea del perfil de Gobierno que Chacabuco necesita. Va a ser un gabinete consensuado con la comunidad, como hicimos con la lista de concejales. No nos debemos a un solo sector político, sino a la ciudad, que tiene una gran expectativa con nosotros. Es un desafío personal, poder encarar una gestión mucho mejor de la que fuimos capaces de ser y que sea superadora de todos los tiempos, para eso hay que interpretar a los vecinos.
-¿Cómo te imaginás una transición con Víctor Aiola?
-No creo que fuera a haber ningún problema.
-¿Tienen diálogo?
-No, pero está más distendida la relación. Hemos sido muy maltratados en su momento, denostados. Y en este último tiempo ha habido otra impronta. Institucionalmente yo he tratado de ser lo más correcto posible, el día que me llamó -después de haberme dicho tantas barbaridades- yo concurrí como exintendente y me puse a disposición, fue durante la pandemia. El otro día coincidimos en dos inauguraciones y hubo buena convivencia. Nosotros no tenemos ánimo de nada más que no sea construir. Venimos a generar puentes, no a profundizar una grieta. Cuando decimos “Darío une” no es la unidad del peronismo, es la de todos los chacabuquenses. Ser intendente solo por el hecho de serlo no nos convoca, yo ya fui ocho años jefe comunal, no me interesa esa chapa. Queremos hacer algo mejor, algo nuevo, y dejar una impronta nueva, transparente. Fuimos capaces de gestionar muchas cosas, y queremos mostrar a la gente que con la política bien entendida se pueden resolver muchas cosas.
-Si te tocara ser Intendente nuevamente, ¿qué harías con la ordenanza de “buenas prácticas agrícolas” prácticamente redactada por el Ingeniero Tedesco que este Gobierno no puso en vigencia?
-Tenemos que reeverla, hay que sentarse en una gran mesa integrada por las asociaciones y distintos sectores de la sociedad.
-Sergio Massa dijo que nadie se sorprenda si en su gabinete aparecen dirigentes de otro color político, ¿te imaginás algo así para la ciudad?
-Lo veremos en su momento, hay muy buena relación con otros espacios. No necesitamos un gabinete sectario, sino uno plural.
-¿Hay gobernabilidad garantizada para la provincia y para Chacabuco si Sergio Massa no es el próximo presidente?
-Esperemos que no volvamos al pasado, que no destruyamos lo conseguido en estos cuarenta años de democracia.