Indudablemente las retenciones deben aplicarse y deben ser segmentadas, es decir, los que más tienen deben pagar más y los que menos tienen deben pagar menos. Las retenciones son, entiendo yo, un instrumento fiscal, histórico. Es un instrumento de política económica. Los neoliberales de ahora, que se llenan la boca y han hecho de las retenciones cero, o las no retenciones el caballito, uno de los caballitos de batalla, no se si saben o ignoran, que el primer gobernante en aplicarla, allá por el año 1862 era nada menos que Bartolomé Mitre. Ese sí que era un cuadro político del liberalismo de entonces. Nada que ver con la orfandad ideológica de los Macri, Bullrich, de los Larreta. Luego la siguió aplicando Mitre, Sarmiento, Avellaneda, Roca, en sus dos gobiernos y Juárez Celman también. Volviendo al presente, ahora es la AFIP la que cobra las retenciones, pero después le hacen una segunda rebanada a estas exportaciones, las grandes exportadoras. Que es ilegal totalmente, y se quedan con eso, le descuentan al productor. Las retenciones deben servir para despegar, desacoplar. Tanto Néstor como Cristina insistieron mucho en este concepto como política de Estado. También lo ha dicho el presidente Alberto Fernández hace poco, los precios internacionales tienen que desengancharse de los internos, pero en la realidad eso no ocurre, no hay ejercicio de poder. Parece que la lapicera no tiene tinta.
Así que, como decimos al principio, no hay que colocar a todos los productores en la misma bolsa. El más grande es el que más paga, y el que menos tiene es el que menos paga, ¿saben cuántos puertos privados hay? Hay más de 50 puertos privados, hay que nacionalizar todo el Río Paraná. ¿Sabemos lo que se pesa?, ¿lo que se exporta? Todo lo que se trafica, lo que se evade en esos puertos privados… Volver a tener una gran flota fluvial es fundamental. Hay mucho más para hablar, quería aportar estos breves conceptos sobre las retenciones.
Nelson Coronel