Somos candidatos
Argentina está dentro de las favoritas a quedarse con la Copa del Mundo, por su historia y presente. Así lo hacen saber protagonistas de las demás selecciones, posicionando a la "Albiceleste" como una de las grandes candidatas. Repasemos las fortalezas que lo avalan y también sus debilidades.
Por Juan Pablo García
Gran parte de los protagonistas de la próxima Copa del Mundo coinciden en algo, en que Argentina es una de las máximas candidatas para quedarse con el trofeo más deseado dentro del fútbol. Anulando cualquier tipo de mufa, analicemos los motivos del porque posicionan a la Scaloneta en lo más alto, ya sea jugadores, técnicos y hasta las casas de apuestas.
Restan apenas 16 días para el comienzo… que rápido pasó todo, hace nada se levantó el trofeo de la Finalissima frente a Italia y decir que fuimos campeones de América parece ser lejano, pero apenas transcurrió un año y monedas. En abril fue el sorteo, haciéndonos la cabeza de quien nos puede tocar, rezando para evitar a Alemania en el grupo. Increíble como pasó el tiempo, que ahora en dos semanas y un poco más, se iniciará el certamen más importante del deporte rey.
Ahora, la gran mayoría de los jugadores y técnicos de las otras selecciones y hasta la prensa extranjera, colocan a la Argentina como la máxima favorita o una de las más fuertes para ganar esta Copa del Mundo. ¿Es para tanto? Veamos los pros y los contras que tendrá la Argentina.
A favor
Argentina ostenta un privilegio que pocas selecciones tiene, que es un equipo consolidado, un once de memoria para salir a jugar en cada partido, donde prevalece lo grupal sobre lo individual.
Otra de las cosas que tiene a su favor es la unión del plantel, donde no hay diferencias y todos son parte de uno. Messi se adapta a los jóvenes para que estén más sueltos y así dejar de lado el respeto hacia la “Pulga”, que para la gran mayoría es su ídolo y lo tratan como tal.
La presencia de Lionel Messi, el renovado capitán que tenemos, que ahora cumple ese rol, de ser el líder y que estamos viendo su mejor versión con la camiseta Argentina, contagia al resto. Hace que sus compañeros jueguen para que él, como también Di Maria y Otamendi, parte de la camada anterior, tengan las alegrías que no pudieron tener en años anteriores.
Esto último fue clave para que este ciclo tenga los éxitos que está teniendo. Lionel Scaloni, figura sobresaliente para que desaparezca la Messidependencia que estuvo siempre en la Argentina, armó un equipo que juegue con Messi y que en las facetas más complicadas de los encuentros, no tenga que aparecer una jugada magistral de Leo, como nos tiene acostumbrado, para salir de ese embrollo. El entrenador pudo conformar un plantel preparado para jugar sin la presencia del mejor del mundo, donde lo hicieron de gran manera.
El hambre de gloria de todos los jugadores, que tienen el objetivo bien claro, que es jugar los siete partidos del Mundial y la solidez en todas las posiciones, trajo consigo los éxitos. La coronación de la Copa América fue una mochila enorme que se sacaron los experimentados de la vieja camada y se los ve más sueltos.
Para no olvidar y que no es un detalle menor, es el largo invicto que posee, de 35 encuentros sin conocer la derrota, donde se encuentra a solo dos del récord histórico.
En contra
Otras de las cosas que la Argentina cuenta y que otras no, son los pocos puntos desfavorables. Ya que no hay mucho y son cuestiones que se pueden solucionar.
Un problema que preocupa son las lesiones, ya que Lo Celso está con un pie afuera y Dybala podría seguir el mismo camino. A ellos se suman la cantidad de jugadores que sintieron alguna molestia en el último tiempo.
A lo que nunca se enfrentó esta selección desde que arrancó el invicto es a empezar con el resultado en contra, es decir, ser el equipo contrario el que anote el primer gol. Nos queda ver la reacción de los futbolistas ante este panorama.
Por último, la presión que recae en los jugadores. De ir a Qatar y estar prácticamente obligados a traer la Copa del Mundo. No creo que sea un factor que pese, porque supieron demostrarlo en la Copa América, de ir al Maracaná y jugar con el cuchillo entre los dientes para hacer historia.