“En nuestro servicio no va a haber vecinos desprotegidos”
Sobre fines del año pasado, se firmó un convenio entre la Municipalidad de Chacabuco y un grupo de médicos, entre los cuales se incluye Pablo Franco de nuestra ciudad, a través del cual se está avanzando en la puesta en marcha de un importante servicio de hemodinamia que se denominará “Cardiovascular Chacabuco SRL”. El servicio se instalará en una de las alas del Hospital Municipal, específicamente en la esquina que da a las calles Pringles y San Luis. Para saber algo más sobre este proyecto, hablamos con el presidente de la empresa, el Dr. Alejandro Mario García Escudero, quien se explaya sobre los problemas cardiovasculares que son la primera causa de muerte en el mundo, pero frente a la cual cada vez se logran más respuestas y aumento en las expectativas de vida.
- Sé que tienen larga trayectoria en todo esto, para nosotros es una buena noticia. Uno escucha muy a menudo a vecinos y vecinas que cuentan “me fui a poner un stent”. El primer reflejo es decir, ante un caso de emergencia, ¿vamos a tener la posibilidad de tener ese servicio en Chacabuco? ¿de qué se trata todo esto?
- Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte natural, fuera de los accidentes, en nuestra sociedad y en todo el mundo. Pero a su vez, los métodos de diagnóstico han mejorado, han permitido llegar antes a los problemas. La solución a las enfermedades cardiovasculares principalmente está en la prevención, es decir, la dieta, cuidar los factores de riesgo cardiovasculares, como la diabetes, el cigarrillo, la hipertensión, el colesterol y hacer ejercicio.
Tanto las válvulas como las arterias -que son caños y válvulas- tienen una cantidad de recursos que permiten muchas veces corregir esto en forma mínimamente invasiva, sin necesidad de interferir en la persona mediante una cirugía. ¿Qué es lo que vamos a hacer en Cardiovascular Chacabuco? Exactamente eso, estamos equipando un quirófano y un servicio que va a complementar la cardiología actual -que es muy buena sobre todo en el Hospital-, y nosotros vamos a dedicarnos a hacer diagnóstico e intervenciones por catéter, en forma mínimamente invasiva.
El hecho de que lleguemos a Chacabuco es porque a través de nuestra actividad hemos detectado que, lógicamente con el volumen de población que tiene Chacabuco, hay una cantidad de pacientes importantes por mes.
- ¿Cuando visitamos a un cardiólogo? Pasados los 50 años, ¿es parte de un control de rutina o tendría que serlo a temprana edad?
- Tendría que ser un control de rutina a partir de una cierta edad. En la juventud, especialmente aquellos que practiquen deportes, sería muy bueno que realicen un examen cardiológico que incluya un electro y un ecocardiograma para detectar posibles anomalías, que son de muy baja incidencia. Digamos que si tengo un examen cardiovascular con el electro y un ecocardiograma normal a los 20 años, es muy probable que hasta los 50 no me pase nada, si bien hay que hacer determinado tipo de chequeos.
¿Qué cosas son importantes? Es importante detectar la hipertensión, los médicos clínicos habitualmente la detectan con un análisis de laboratorio para saber si la persona es diabética o tiene algún trastorno de colesterol.
Después, alrededor de los 50, uno debería hacerse un examen cardiovascular cada tres a cinco años, que incluya electrocardiograma y la revisión por un cardiólogo.Y, ante cualquier síntoma, como pérdidas de conocimiento, dolores de pecho, palpitaciones y demás, hacer una consulta, normal sin miedo, porque muchos de estos síntomas en la mayoría son absolutamente banales. Pero en ocasiones puede ser necesario chequear algo un poco más a fondo. Nosotros estamos al final de un camino muy largo, de muchísimos pacientes que van a ir al cardiólogo. Eventualmente vamos a intervenir a uno o dos, pero también serán los pacientes que están más graves.
- ¿Hay carga genética en las enfermedades cardiovasculares?
- Sí, hay una carga genética, de hecho los antecedentes familiares se consideran un factor de riesgo cuando han generado infartos con muertes jóvenes. Pero para que no entremos en pánico, lo que hay que tener claro, es que vamos a recibir la mitad de la carga genética de tu papá o de tu mamá, entonces tu chance es baja. No es que solamente porque a tu papá le pasó, te va a pasar. Lo que corresponde es que vayas al médico y se hagan los exámenes. Para evitar todos estos problemas hay que llevar una vida lo más sana posible, lo que no quiere decir que uno no se puede comer un asado, ni nada por el estilo, sino que no lo vas a hacer todos los días. Si yo me mantengo haciendo ejercicio, con un peso normal y tengo el colesterol, la presión, la diabetes controladas, es poco probable que yo tenga problemas de joven.
- ¿Y el estrés juega un papel fundamental?
- Es un factor de riesgo, pero no está muy claro el vínculo exacto entre el estrés y la enfermedad cardiovascular. Hay mucha gente excesivamente estresada que nunca le pasa nada y al revés. Aunque el estrés no te provoque enfermedades cardiovasculares, te va a hacer vivir mal. Entonces el manejo del estrés es importante, no solo por la cantidad de vida, sino por la calidad.
- ¿Cuál es el umbral de tiempo para que ustedes puedan llegar a dar una respuesta a tiempo, desde que voy a mi cardiólogo hasta una intervención con ustedes?
- El tiempo siempre depende del cuadro clínico, el único momento donde el tiempo juega es cuando hay un infarto del miocardio. El infarto es cuando una arteria del corazón se tapa en forma completa. A partir de ahí, cuanto más rápido uno consulte -preferentemente entre seis y doce horas, es decir, hasta 12 horas podemos llegar a mejorar ese cuadro- mejor. Cuando una persona tiene un dolor -siempre digo que hay un síntoma, el síntoma del dolor coronario existe, no en todos los casos, sino en el 70 u 80 por ciento- se describe como dolor con sensación de muerte inminente, es decir, es un dolor que uno sabe que es serio. Cuando eso ocurre hay que ir de inmediato a una guardia, ahí se van a desencadenar una serie de protocolos que van a determinar qué y cuándo se va a hacer algo, que es algo relativamente técnico. Pero lo que uno debe entender es que cuando tiene un síntoma que le parece importante tiene que dirigirse de inmediato a una guardia.
Una vez que un paciente con un infarto, entra en contacto con una guardia baja en su mortalidad del 50 al 15%, solo por entrar en una guardia, después vamos a bajar esa mortalidad en la medida que nos vamos tratando.
- Respecto al convenio que ustedes firman con el Municipio, ¿qué prevé para los vecinos que están desprotegidos de alguna cobertura médica?
- Dentro de lo que hacemos nosotros, que es cardiología intervencionista, no va a haber vecinos desprotegidos. Es decir, dentro de este convenio cualquier paciente, tenga o no tenga cobertura, va a recibir la misma atención y los mismos dispositivos. En el caso de un stent y ese tipo de cosas, lo van a recibir independientemente de que tengan o no una cobertura o un financiador. Por supuesto que hay dispositivos y prácticas, muy pocas, que son las cirugías cardíacas en general y algunos dispositivos muy específicos a los que no tenemos acceso porque dependen de otras situaciones, pero son realmente muy pocos y ocurre muy ocasionalmente.
- En el último tiempo se escucha que mucha gente tiene colocado un stent, después de eso, ¿volvés a una vida totalmente normal?
- A ver, voy a hacer grosero en la descripción, vamos a suponer que tenemos un caño que se tapó con sarro. La diferencia es que los caños son rígidos y las arterias son relativamente elásticas. En el caso del stent, es como si fuera un rulero, una malla metálica que se coloca en el lugar de la obstrucción, se despliega y aplasta ese sarro, que en este caso es el colesterol y otro material que hay dentro de la arteria, y deja el paso de la misma libre. Hay pacientes que nunca más van a necesitar absolutamente nada y algunos que
van a necesitar algún tipo de cuidado. Por lo general, la mayor parte de las personas, pueden volver a su vida absolutamente normal, incluso a practicar deportes.
- Este tipo de servicio hoy se está brindando con el mismo grupo de médicos en la ciudad de Chivilcoy, ¿es correcto?
- Exactamente, estamos hace 10 o 12 años y lo que motivó nuestro deseo -y que estamos llevando a cabo al instalarnos en Chacabuco- es que la demanda es alta y se da una particularidad, y es que el Hospital de Chacabuco es un buen centro de salud, no se puede decir lo mismo de todos lados y los cardiólogos están muy capacitados. Nosotros somos la etapa final de un proceso, entonces contar con un grupo cardiológico sólido nos permite hacer todo esto en forma muy segura. Instalarnos en Chacabuco nos permite saber que si nosotros podemos hacer lo nuestro bien, vamos a estar mucho más que apoyados para que la prestación, el producto y el servicio final, sea de alta calidad, que es lo que estamos buscando.
- Uno lee habitualmente que las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en el país y en el mundo, ¿las estadísticas mejoran con el avance de la medicina y los avances científicos?
- Sí, mejoran mucho. El aumento de la expectativa de vida no está relacionado con estas técnicas. Si uno hiciera el análisis para saber cuánto aportan todas las técnicas, podríamos ver que aportan mucho menos que la prevención. El mayor aporte lo hace la prevención pero indudablemente todas estas técnicas permiten salvar una enorme cantidad de problemas y prolongar la vida. Yo ya tengo 66 años, cualquiera de nosotros sabe qué significaba tener 66 años hace 40 años, qué significa hoy y no me quiero imaginar lo que va a ser dentro de 30 años.